¿Nos vemos en 2018? No... esto empezó ya
Desde que en 2012 llevamos a cabo el primer congreso centrado en la arqueología ha llovido mucho. En 2015 conseguimos crear un ambiente participativo sin parangón hasta el momento en nuestro entorno. Un ambiente en el que personas y comunidades, el tema central, tuvieron cabida más allá del título en un proceso que se extendió a lo largo de todo el año y culminó con dos acciones participativas en el propio congreso. Además, las redes sociales comenzaron a jugar un papel central, contribuyendo a la creación de una comunidad más allá de la academia. Ahora tenemos el reto de seguir superando nuestras propias expectativas de cara a una nueva edición que recupere la esencia de los congresos, en un contexto en el que la estandarización de estos eventos lleva a desvirtuar los valores de comunidad que llevan a una verdadera creación y transferencia del conocimiento. Pero aunque le ponemos mucha voluntad, no somos súper héroes ni súper heroínas y este es un camino en el que queremos que pa...